viernes, 12 de septiembre de 2014
Principio de curso en Extremadura, nubes y claros
Primer curso en el que se se va a aplicar las primeras medidas de la LOMCE y que dejan presagiar un panorama de tormentas intensas que si no se remedia antes, dejarán los campos de la enseñanza pública en barbecho.
La precipitada aplicación de la LOMCE ya tiene sus primeras consecuencias en nuestra comunidad. La caótica puesta en marcha del ciclo de la F.P básica, la imposibilidad material de incorporar los nuevos currículum a la programación general anual y el sálvese quien pueda con los nuevos libros de texto en los niveles de primero, tercero y quinto de primaria. La decisión de trasladar a cada centro la incorporación o no de nuevos libros de texto no deja de ser un guiño a las poderosas editoriales que tienen algo más que un interés educativo. Seguimos sin potenciar un trabajo a medio plazo facilitando la elaboración de materiales colectivos alternativos, a pesar de la facilidad de comunicación transversal que ofrecen las redes.
Cabe recordar que en un país cada vez más convencido que la religión es un asunto de libertad y opción de cada cual, en el currículum de primaria la Junta ha querido ser más papista que Wert. Ha doblado las horas de religión que se imparten en los únicos territorios con competencia directa del Ministerio, y lo hace en detrimento de otros contenidos como son las enseñanzas artísticas o las segundas lenguas extranjeras. Para IU, desde el máximo respeto a todas las opciones religiosas, seguimos pensando que su presencia en la enseñanza pública debería ser nula. Los valores, la historia, su importancia en la conformación de la visión social del mundo occidental deberían impartirse en las áreas correspondientes. El adoctrinamiento y sesgo no tienen cabida .
Seguimos con la aplicación de las restricciones. El ejemplo más claro es la esquelética oferta de empleo (31 plazas para toda la próxima convocatoria cuando en el 2010 sólo en francés de secundaria se convocaron 25 plazas). Una raquítica oferta que dispara la bolsa de interinidades y precariza el empleo en la enseñanza pública. Continuamos con el sesgo social de los recortes. Menos becas, menos mecanismos de compensación, matrículas más caras en las enseñanzas universitarias...
El coctel se adereza con los intentos de privatización del servicio público en hilo directo con las recomendaciones de la Organización Mundial del Comercio. El último proyecto del cheque de la F.P de la ministra de Empleo, Fátima Báñez es una perla más para traspasar dinero público a las manos privadas. Primero se desprestigia el sistema público y luego se da la libertad al “usuario” para que vaya a centros privados que por menos acaban dando menos. En el caso de la F.P la LOMCE ha recuperado el camino del desprestigio que tenía durante el franquismo. El que puede y vale, a la universidad , el que no puede o no vale a la F.P.
Lo que nos ocurre en la educación no deja de ser la concreción de lo que está ocurriendo con el resto de las políticas. La situación es cada vez más lamentable para la inmensa mayoría, pero el lamento tiene que transformarse en rebeldía. Hay que sacar la cabeza de debajo de la manta de la estudiada y fructífera resignación. La responsabilidad de las fuerzas políticas que defendemos otro modelo es el hacerlo posible. La responsabilidad del conjunto de la población es ser participes y protagonistas del cambio.
Desde IU queremos construir alternativas. En educación estamos proponiendo una LEY de EDUCACIÓN. Algún día se debatirá en el parlamento, pero lo importante es que sea fruto de la participación y del trabajo conjunto de los que somos la inmensa mayoría. Busquemos los consensos sociales en una manera muy diferente de entender la política.
Badajoz 11 de Septiembre del 2014
Silvio Navalón Mañalich.
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