martes, 5 de julio de 2011

IU y su decisión

IU, Extremadura y la encrucijada

Silvio Navalón Mañalich

No era fácil tomar una una decisión cuando el electorado decide castigar al PSOE. En Extremadura
más de 20% de los votantes del PSOE en la región deciden cambiar su voto. Siendo muy lineales pero a groso modo podrían servir las cifras un máximo de 7.000 votos van a para izquierda unida y otros 63.000 al PP.
Con tres asientos en la Asamblea le toca a IU intentar llevar a cabo su programa electoral y así cumplir con sus electores. Es evidente que con esta correlación de fuerzas uno no puede pensar sólo en el trabajo en la Asamblea sino en seguir amplificando su quehacer político en la calle, la prensa, a la postre en el trabajo político del conjunto de la organización. La presencia en el parlamento extremeño sin duda amplificará y facilitará este trabajo político,pero no deja de ser un medio para cumplir los compromisos de cambio que miren más a la izquierda.
Resulta ser ,entre otras cosas, que los tres votos de IU deciden quienes van a gobernar en Extremadura en un contexto de debacle del PSOE por asumir y llevar a cabo políticas neoliberales. Un escenario de teatro de títeres en el que el público son los votantes y los que mueven los hilos los mercados financieros. Los personajes de este teatrillo alternan su protagonismo, pero el guión está escrito con el mismo trazo, eso si con adaptación a las características de cada uno de los personajes a gusto del público y de los hacedores de opinión.
Ante el dilema , IU de Extremadura decide dos cosas: escribir negro sobre blanco su propuesta de mínimos y convocar una consulta a las bases y personas que participaron en la campaña electoral. Los resultados son ya conocidos. La opción de la abstención resulta mayoritaria y los 12 puntos son asumidos por el PP. Los dos pasos responden a planteamientos políticos positivos. La ausencia de mayorías absolutas y la democratización de las estructuras de la organización. Lo primero ha sido fruto entre otras cosas del trabajo político de IU en Extremadura. Lo segundo de la ósmosis con el 15M y un precedente inédito en la política española por la horizontalidad de la toma de la decisión. Es cierto que ha pillado a contrapié una cúpula que le cuesta admitir la decisión de no apoyar al PSOE como ha venido siendo tradicional, sumándose al coro de voceros que no quieren entender que el germen de la abstención es el alejamiento de políticos y políticas cada vez más ajenas de lo que defiende IU.
La situación de carencia de mayoría absolutas y la ausencia de otras opciones, va a permitir demostrar que existen otras posibilidades en la elección de alternativas diferentes, con presupuestos propios. El haber asumido los 12 puntos planteados abre una puerta importante. Su cumplimiento distinguirá el chalaneo de la política. El ofrecimiento de puestos en la noche electoral por parte del PSOE, sonaba mas a lo primero que a lo segundo. Un ofrecimiento desacertado ya que incidía en la desconfianza. Te pago y te callas. Una desconfianza más después de las experiencias de incumplimientos sistemáticos tanto en Extremadura como en el Congreso. Las distancias políticas se han ido agrandando después del 10 de mayo del 2010 . Junto a la desconfianza, justifican la ausencia de apoyos al PSOE y por supuesto, el mantenimiento de la distancia que ya nos separaba del PP.
No cabe duda que no es una decisión fácil, que puede tener un coste político si se sigue viendo al PSOE a través del prisma bipartidista que le sitúa en la franja roja del espectro político y no como un elemento más del teatrillo de títeres de la alternancia. Una apuesta arriesgada si no somos capaces de trabajar contra corriente, informar, organizar, tensar a la sociedad civil y converger con los movimientos del 15M en una sociedad más horizontal,consciente y comprometida.

5 de julio 2011

3 comentarios:

  1. Si creéis que los que van a gobernar favorecerán a las clases trabajadoras y a los necesitados más que los que estaban, me temo que es porque no los conocéis lo suficiente. Hay mucha gente en la izquierda, que NUNCA ha votado al PSOE, y que no puede entender que vota a un partido y un programa de izquierda para acabar abriendo la puerta a una derecha que, como vimos en Badajoz capital NUNCA abandonará el poder. Chirac y Le Pen eran derecha, pero la izquierda se tapó la nariz y evitó lo que era lógico en aquella segunda vuelta. No se puede actuar con cortoplacismo. IU Extremadura se arrepentirá siempre de este error, que sólo pueden entender mil militantes y cinco mil votantes. Los otros 31000 votantes no hacen más que pedirnos explicaciones a quienes les hemos estado dando la tabarra para que voten IU. ¿Qué les explico? ¿Por qué no votáis en contra el jueves, forzamos elecciones y arrasamos al PSOE? Eso sí que sería coherente y serviría para ver que la gente del pueblo ha entendido nuestro mensaje

    ResponderEliminar
  2. Javier, sigo viendo tus análisis simples y poco documentados. Será por que eres muy joven. A pesar de tu juventud eres un poco catastrofista y poco objetivo. No creemos que el PP vaya a hacer una política de izquierda, porque
    no tienen mayoría, mientras que haya gente como tú y como yo, que estamos ilusionados por un cambio más justo, la derecha no tendrá nada que hacer. Tenemos que unirnos fuera y deja de pensar en el PSOE, como una alternativa de izquierda.

    ResponderEliminar
  3. La comparación no es todo acertada.Le Pen y Chirac se enfrentaron en segunda vuelta por la derrota del partido socialista francés en la primera. Se trata de unos comicios en el que el pueblo votó. Por cierto hubo mas del 20% de abstención y el voto en blanco subió al 5,39%.(poco más o menos lo que ha sacado IU en Extremadura).Fue una jugada maestra de Chirac que se hizo con la presidencia de la república con el mayor porcentaje de votos de la historia.
    Yo sé que efectivamente hay gente que ha votado a IU, pensando que de manera automática sus votos se unirían al PSOE y este hecho podría rectificar las políticas de derechas que estaba haciendo el PSOE al verse obligado a mirar a su izquierda. No me atrevo a decir cuantos e interpretar un número en función de creencias es algo que tampoco suelo practicar. En todo caso las cifras de la consulta a la afiliación hablan de un 30%/70% y podría existir una correlación entre esta cifra y la del resto de los votantes.
    Sea como fuere,la decisión política pasadas las elecciones corresponde a la organización que ha recibido los votos. Es la primera vez que para tomarla se consulta a las bases. Puede parecer
    baladí pero creo que ha sido la única manera de asegurar que IU de Extremadura no acabase fraccionada. Como sabrás yo defendí las tesis contrarias de la que finalmente salió. No se si hubiese asumido el resultado si el proceso hubiese sido otro y el resultado final el mismo.
    Por cierto yo también oí en la campaña "no pactaremos ni con la derecha real ni con la derecha camuflada", también lo de "no pasarán" y lo de ni por activa ni por pasiva". Coincido que esta retórica es contradictoria y deberían explicitarse en los programas de todos los partidos lo que se va a hacer con los votos recibidos. Una buena manera para que los votantes sepan a que atenerse.De todas maneras te recuerdo que IU no apoya al PP,ni conforma coalición alguna con la derecha.
    Convocar nuevas elecciones en estos momentos me parece una irresponsabilidad democrática.Todos los grupos que han obtenido representación tendrán que asumir y lidiar con los resultados. Esto forma parte de la política.
    Dentro de un tiempo podremos valorar si la decisión fue o no acertada. Antes coincidiremos que el PSOE no sólo tenía que dar un giro a la izquierda sino
    depurar las estructuras caciquiles que ha establecido en Extremadura. Cuando apoyé la opción de que se diesen los votos para investir a Vara,siempre me quedó la duda de saber como podríamos hacer girar efectivamente el PSOE y como nos lo íbamos a montar para controlar y comprobar la depuración de esta estructura servil y caciquil. Si te parece podemos comentarlo.

    ResponderEliminar